Esta segunda parte de Eurotrip 2012 nos lleva a través de las ciudades de Viena, Venecia, Roma, Valencia y Barcelona. Varios de ellos considerados unos imperdibles de Europa, y que gratamente disfrutaran de conocer.
ITINERARIO
PRIMERA PARTE
- 04-13 Junio: Groningen, Holanda
- 14-16 Junio: Amsterdam, Holanda
- 16-19 Junio: Hamburgo, Alemania
- 19-21 Junio: Berlin, Alemania
- 22-23 Junio: Praga, República Checa
SEGUNDA PARTE
- 23-25 Junio: Viena, Austria
- 26 Junio: Venecia, Italia
- 27-30 Junio: Roma, Italia
- 01-28 Julio: Valencia, España
- 06-08 Julio: Barcelona España
- 13-16 Julio: Paris, Francia
- 20-22 Julio: Granada – Nerja, España
- 28-31 Julio: Madrid, España
- 30 Julio: Toledo, España
- 31 Julio – 03 Agosto: Londres, Inglaterra
Table of Contents
VIENA
24-25 junio
Movilización:
– Tren nocturno desde Praga 00.05 – 06:00 / bahn.de
Alojamiento:
– Happy Hostel → Buena atención, buenas piezas y baños, espacioso, se puede ocupar algo la cocina pidiendo autorización. Un poco alejado del downtown, sin embargo, a 5 minutos de la estación, y considerando lo grande que es la ciudad uno igual tiene que comprar ticket de metro diario. Recomendable.
DIA 1
- Iglesia San Carlos de Borromeo → Durante la fuerte epidemia de peste que azotó Viena en 1713, y que cobró la vida de unas 8.000 personas, el emperador Carlos VI prometió que una vez terminada la epidemia, levantaría un templo dedicado a San Carlos Borromeo, arzobispo de Milán y héroe de la epidemia de la peste de 1576.
- Iglesia Maria Vom Siege → Iglesia católica construida en 1868. Está probablemente dentro de las más bellas de Viena.
- Iglesia Stephans → La madre de las iglesias en Viena. Gigantesca e imponente, lugar de residencia del arzobispo. Para quien quiera dar un paseo en carruaje, desde aquí parten.
- Burg Theater → Famoso teatro nacional de Austria, y uno de los más importantes del mundo de la lengua alemana.
- Rathaus → Ayuntamiento de Viena. Edificio de estilo gótico construido a finales del siglo XIX. En lo alto de la torre se encuentra el Rathausmann, una escultura dorada de 3,5 mts que representa a un portaestandarte; símbolo de Viena. Frente se encuentra el Rathauspark.
- Parlamento → Ubicado a pasos del Rathaus. Como todo el resto de las construcciones en Vienna, lo más característico es lo enorme que es. Estilo neoclásico, con una bonita escultura de Atenea que protege la entrada.
- Patio de los Museos
- Conciertos → Vienna es conocida como la “capital musical”. Se darán cuenta cuando lleguen, que por donde vayan les ofrecerán diferentes entradas a conciertos. Cuestan en el rango de los 25-30 €. Yo fui a una que duro 1 ½ horas y que combinaba música clásica con ballet y que me gusto harto.
DIA 2
- Palacio de Hamburgos (Schonbrum) → Este palacio es la antigua residencia de verano de la familia del emperador. Es realmente impresionante por lo magnificente que es; cuenta con decenas de salones, piezas exquisitamente decoradas y un jardín gigantesco y hermoso.
- Belvedere → Palacio construido en 1714 para el príncipe Eugenio de Saboya tras la derrota de los turcos, con el objeto de generar un recinto para fiestas y así aumentar su popularidad. Es un palacio alto y uno bajo, ambos separados por un gran jardín decorado con múltiples piletas y esculturas.
- Hofburg → Es el palacio más grande de la ciudad, con ni más ni menos que 2.600 piezas. Era la residencia de la mayor parte de la realeza Austriaca, y es actualmente la residencia del presidente de la república.
VENECIA
26 junio
Movilización:
– Tren nocturno desde Viena, 20:40 – 08:30 / bahn.de
Venecia era uno de esos destinos imperdibles, y que sin importar cuanto tiempo estuviese, valía la pena ir si o si. El tiempo claramente no fue algo que me sobrase en este viaje, por lo tanto tuve que tomar una decisión… mi siguiente destino sería Roma, otro imperdible, pero que a diferencia de Venecia es incomparablemente más grande, y por lo tanto requiere mucho más tiempo. Por esta razón, decidí que tomaría un tren para estar a primera hora en Venecia y partiría el mismo día a última hora… sería un día express.
Llegué a las 8.30 a la terminal después de un viaje nocturno bastante tranquilo desde Viena, dejé mi mochila en el “guardamochilas” de la estación (me cobraron +-16€) y partí a recorrer la ciudad. Lo primero es lo primero… sin mapa y sin indicaciones no se llega a ningún lado, así que pasé al primer hotel que ví y les expliqué que había perdido mi mapa y si eran tan amables de regalarme uno… y luego… pasé al hotel de al lado a preguntar los destinos más importantes! =P
La estación de trenes queda exactamente en el lado contrario de la plaza San Marcos, por lo tanto para llegar allá debes recorrer gran parte de la ciudad (que no es gran cosa en tiempo). Me fui caminando por la calle principal, que es donde están todas la tiendas y las zonas más turísticas, sin embargo, si tienen el tiempo suficiente creo que además de recorrer esta zona, deberían simplemente dejarse perder por la ciudad y caminar por donde sea que los lleven las calles, cosa que es extremadamente fácil ya que hay un sin fin de callejones sin nombres y que es difícil seguir en el mapa. Cada rincón de la ciudad tiene su encanto, y para quienes gustamos de la fotografía, sin duda alguna es de aquellos destinos que nos roba horas y horas disfrutando de ella.
El primer punto turístico que se cruzó por mi camino fue el “Ponte di Rialto”, el puente más antiguo de los cuatro que cruzan el gran canal y que fue construido en el siglo XVI. Desde allí hacia la Plaza San Marcos es un paseo tranquilo cruzando callejones y preciosos canales. La plaza de San Marcos es la única plaza de toda Venecia y donde encontraran cientos de turistas y miles de palomas!! Este es el principal centro turístico de Venecia, ya que aquí está edificada la Basílica de San Marcos, el Campanario de San Marcos y el Palacio Ducal.
Aquí prepárense para las colas. Les recomiendo que traten de organizar su tiempo tal que hagan las colas a la hora de almuerzo que hay menos gente. Yo estuve aproximadamente 1 hora esperando para poder entrar al campanario, sin embargo la vista a 100 metros de altura que se tiene de la ciudad bien vale cada minuto esperado. Una vez que bajé del campanario y fui a pasear por la costa que da hacia el Canale Della Giudecca, donde se tiene una vista preciosa de la isla de San Giorgio Maggiore con su iglesia, y de el “engondoladero” (así como embarcadero? pero de góndolas), desde donde salen continuamente góndolas y embarcaciones que cruzan el canal. Si quieren conocer alguna de las islas, es aquí donde deben preguntar.
Más vacía la fila para la Basílica, esperé en la cola hasta entrar a la famosa catedral. Realmente te deja la boca abierta estar ahí adentro… la cantidad de arte y decoración es infinita y sin lugar a dudas no alcanza el tiempo para poder procesar todo. La entrada a la Basílica es gratis, sin embargo, las entradas al tesoro y la pala de oro se deben pagar a parte. El tesoro, es una colección magnífica de cálices, copas, relicarios y otros objetos de oro, plata y cristal bizantino. Probablemente lo que más me llamó la atención fueron unas especies de urnas con huesos humanos dentro (por ejemplo un peroné… nunca había visto algo semejante, y me declaro totalmente ignorante frente al tema). La pala de oro, incluso más impresionante que el tesoro, es un retablo que se encuentra detrás del altar mayor y que se compone de 250 pinturas en diferentes paneles de oro adornados con joyas y encuadradas por un marco gótico de plata dorada, y que data de 976 DC, una cosa poca dicen.
Finalmente entré al Palacio Ducal. Construcción de estilo gótica que fue residencia del Magistrado supremo (Dux), sede de gobierno, sede de la corte suprema y además prisión… todo en uno, por lo tanto, es un panorama que te ocupa tiempo. Lo primero que recorrí fue la zona que era residencia y sede de gobierno, por lo que aquí son principalmente habitaciones y salones exquisitamente decorados, con muchas obras de arte y un museo de armas que me encantó, donde tienen sin fin de espadas, armaduras, pistolas, lanzas, etc. Cuando uno termina de ver esta zona (todo está guiado para seguir un orden), se llega directamente al “puente de los suspiros” y que más de alguna vez deben haber escuchado. Este puente comunicaba lo que era el palacio Ducal con la prisión de la inquisición, y debe su nombre debido a que al cruzarlo era la última vez que los prisioneros veían la luz del día y la laguna de Venecia. La prisión es eso, una prisión, y la verdad lo emocionante es estar en el lugar en sí, más que lo arquitectónico mismo. Son varios pasillos con acceso a las antiguas celdas de piedra, resguardadas por pequeñas pero gruesas puertas de madera cubiertas de acero.
Cuando terminé de recorrer la plaza San Marcos eran las 18.30 y solo me faltaba un destino por ver, la Iglesia Santa Maria Della Salute y que tiene la particularidad que está construida al lado de la aduana de Venecia (Punta Della Dogano), desde donde hay una vista preciosa. Lamentablemente, cuando llegué eran 18.55 y no me dejaron entrar porque cerraban a las 19.00. De todas formas, vale la pena ir a verla y de pasadita ir a la Punta Della Dogano. Desde ahí comenzó mi retorno hacia la terminal de trenes… decidido a no volver por la misma calle llena de turistas, busqué un camino alternativo y me fui recorriendo toda la costa de Dorsoduro, que da hacia el Canale Della Giudecca y que tiene una vista imperdible al atardecer. Desde allí fui siguiendo algunos canales cruzando la ciudad hasta que logré encontrar el Gran Canal, desde el cual ya era sencillo alcanzar la terminal. Como aún era temprano, pasé a un supermercado a comprar algunas cosas y me instalé en un muelle a prepararme algo para comer y esperar que se oscureciese. Definitivamente, si van a Venecia, una cosa que no pueden perderse es estar aquí de noche. Yo si bien estuve solo algunas horas, fue suficiente para deleitar la vista, mas de haber podido, hubiese recorrido toda la ciudad nuevamente. Cuando el reloj marcaba las 22:30, agarré mis cosas, fui por mi mochila y me subí al tren que me llevaría a mi último destino antes de volar a España; la famosa ciudad de Roma.
ROMA
27-30 junio
Movilización:
– Tren nocturno desde Venecia, 23:30 – 06:20
Alojamiento:
– Twincities → Es un hostal pequeño y relativamente nuevo. Tiene excelente ambiente, todos muy unidos, te invitan a comer gratis, incluye algo de comida para el desayuno. Piezas y baño muy buenas, a 15 minutos caminando del metro, alejado de la estación de tren. Muy recomendable.
Tomé mi tren nocturno desde Venecia, junto con un grupo de gringos que estaban de viaje para celebrar que habían salido de colegio… y yo que pensaba dormir desde tempranito. Nos fuimos conversando un buen rato hasta que paramos en una estación que se detenía por más tiempo, el suficiente para bajarnos corriendo a comprar una cuantas cervezas y seguir la fiesta camino a Roma, hasta que ya nos mató el sueño y nos ingeniamos para amontonarnos en esas cabinas de tren minúsculas.
Roma, al igual que Dresden, tampoco estuvo dentro de mis destinos iniciales. Tenía tantos destinos por ver y tan poco tiempo, que consideraba que era una ciudad que debía dejar para otro viaje. Evidentemente eso no fue lo que pasó… es que tanto que me insistieron en que no podía dejar de conocerla, que finalmente cambie todo mi itinerario, a tal punto que finalmente fue la ciudad que más días estuve en total… y realmente los valió!! Roma es una ciudad grande, pero totalmente abarcable si tienes los días suficientes. Mi primer consejo es que cuando lleguen a la terminal, compren en cualquier tabaquería la Rome Pass, una tarjeta que les permite viajar gratis en el metro y en las micros, y además les permite la entrada a los dos primeros museos o sitios arqueológicos que entren (de una lista que te entregan), evitarse la fila y tener descuentos en otros tantos sitios más.
Como sabía que el Coliseo se llenaba terriblemente, apenas llegué dejé las cosas en mi hostal y me fui lo suficientemente temprano para entrar antes de que estuviese tan repleto de turistas como probablemente se llenaba en sus tiempos de apogeo. El Coliseo roamano es… el COLISEO, creo que es una de las cosas que más me a sorprendido ver, probablemente porque me fascina la historia Romana, pero también porque es realmente una construcción imponente en donde se ve, se siente y se palpa la historia. Este anfiteatro construido en el siglo I, debe su nombre a la gigantesca estatua de 35 metros que se erguía a uno de sus costados, el “Coloso de Nerón”. Por más de 400 años el coliseo fue espectador de cientos de luchas de gladiadores, obras de teatro, representaciones de batallas, cazas de animales y quien sabe cuanto espectáculo más, hasta que cayó el imperio Romano y pasó a ser desde fábrica, refugio, sede de orden religiosa, hasta una cantera (motivo por el cual hoy no se preserva en su 100%). Les recomiendo que por ningún motivo dejen de recorrerlo con audio guía, y que se den su tiempo. Si quieren recorrer el hipogeo (mazmorras), estarán obligados a contratar un tour especial, que yo no averigüe, pero sí que es un número restringido que se les permite bajar, por lo tanto hay que tratar de tomarlo temprano.
Al lado del Coliseo, se encuentra el Arco de Constantino, un arco del triunfo excelentemente conservado, y que fue construido en el 312 dc para honrar la victoria de Constantino I el Grande, en la batalla del Puente Silvio contra el emperador romano de occidente, Majencio. Paso siguiente que deben dar, es entrar al Palatino Romano. La entrada para el Coliseo es igualmente valida para el Palatino y el foro Romano, por lo tanto solo deben pasar con su Rome Pass o mostrar el ticket. Yo acá cometí el terrible error de no arrendar audio guía, no por no querer pagar, sino, porque por la entrada que llegué (no era la principal) aparentemente no habían, así que les sugiero preguntar, porque recorrerlo sin audio guía es bastante menos entretenido, ya que hay muchas zonas arqueológicas que no son más que vestigios y que a veces uno no entiende mucho.
El Palatino, es un monte que se encuentra al lado del Coliseo, del Foro Romano y del Circo Máximo. Es una de las zonas más antiguas de la ciudad, donde los romanos más adinerados vivían. Es bastante grande y se encuentran varias ruinas, dentro de las cuales quizás las más importantes son las del Palacio de Augusto y el templo a Apolo que construyó al lado, ya que aquí aún se pueden observar murales en excelente estado. Mi recomendación, es que partan por el Palatino, cuya entrada está al lado del Arco de Constantino, y luego continúen con el Foro Romano (están comunicados), ya que si bien las ruinas vale la pena verlas 100%, no pueden competir con lo que es el Foro, ya que aquí es donde sucedía todo, y se codea uno a uno con la magnificencia del Coliseo. Para que se hagan una idea, esta es la zona central donde se desarrolló la ciudad, y por lo tanto está repleto de arqueología deslumbrante, como los templos de Rómulo, Saturno y Venus, un par de Basílicas, el famoso Arco de Tito (Construido en el siglo I dc), la Curia (sede del Senado) y otros cuantos más. Puede ser que no sea referencia, pero gasté aproximadamente 6 horas en ver Coliseo, Foro y Palatino (el Circo lo dejé para otro día).
Eran las 4 de la tarde cuando finalmente salí del Foro… moría de hambre, sin embargo, ponerme a buscar comida con tanto que ver parecía poco sensato, así que empecé la marcha en rumbo hacia una gran construcción que colindaba con el Foro, sin saber que me dirigía ni más ni menos que al Pallazo Senatorio (el ayuntamiento de la ciudad) y al famoso Museo Capitolino. Ambos se erigen en torno a la Plaza de Campidoglio, que tiene la peculiaridad que fue completamente diseñada por Miguel Ángel, con una particular calle escalonada por donde se accede, y con la estatua de Marco Aurelio en el centro (copia, la original está en el museo). Al museo Capitolino también entré gratis con la Rome Pass, y dentro de las cosas que no pueden perderse, está la vista panorámica del Foro, y luego algunas obras como la estatua original de Marco Aurelio a caballo, la Loba Capitolina (Rómulo y Remo), el Coloso de Constantino y el sarcófago con la vida de Aquiles tallada.
Cuando salí del museo ya eran las 19.00 y mi piernas no daban más!! Tomé el metro y me fui directo a mi hostal. Cuando llegué, me recibió uno de los chicos que trabajaba ahí, me mostró todo, me presentó a la gente y me invitó a participar de la comida de la noche, absolutamente gratis y por la buena onda!! Esa noche cené con ellos, junto a un grupo de chicos ingleses y un grupo de chicas francesas. Luego de eso me iría a ordenar las cosas, organizar mi día siguiente y a la cama, que había sido un día extremadamente agotador y mi cuerpo no daba más (en especial por las agradables temperaturas veraniegas de Roma!).
El segundo día era día de Catacumbas de Calixto!! Las catacumbas son cementerios subterráneos que los cristianos ocuparon los primeros siglos D.C. Solo en Roma se han descubierto más de 60, sin embargo las de Calixto, tienen la gracia de ser una de las más grandes encontradas, con 15 hectáreas, casi 20 km. de galerías y una profundidad de más de 20 metros. Fueron construidas en el siglo II y aquí fueron sepultados miles de cristianos, donde también se encontraron 16 papas. Es una experiencia que bien vale la pena ver, ya que independiente de las creencias de uno, es historia que difícilmente se pueda ver en otro lado (el tipo de terreno fue esencial para permitir la realización de estas). Para llegar, deben tomar el bus 118 que sale desde el metro pirámide y bajarse donde lo haga casi toda la gente… fácil!! La entrada cuesta aproximadamente 7 euros e incluye el guía, ya que está prohibido bajar por tu cuenta. Primero hace una introducción del lugar y luego te lleva a través de las galerías explicándote las cosas más importantes durante más o menos hora y media. Para volver a la ciudad, es igual de fácil, sin embargo, deben preguntar cuál bus tomar, que yo ya lo olvidé.
Una vez que volví a la ciudad, me bajé cerca del metro San Giovanni, sin saber exactamente dónde estaba. A lo lejos vi una construcción blanca que parecía una iglesia y me acerqué para entrar; era ni más ni menos que la Iglesia San Giovanni in Laterano, la catedral de Roma. Es la más antigua y la de rango más alto entre las cuatro basílicas papales de Roma y sede episcopal del papa, por lo tanto ya se podrán imaginar de qué les hablo. Tan solo decirles que es llamada la “madre de todas las iglesias”. El interior es rebosante en mármol y mosaicos, con la presencia de majestuosas estatuas de los 12 apóstoles, y bajo el altar mayor, la sepultura del papa Martin V. No pueden perdérsela por ningún motivo!
Después de eso tomé el metro y me fui a la Plaza del Popolo, una de las plazas más conocidas de Roma, donde se encuentra la Iglesia Santa Maria de Popolo (a la cual no me dejaron entrar porque cierran a la hora de almuerzo, así que ojo!); la Puerta del Popolo, antigua entrada de la muralla Aureliana de Roma; y el famoso obelisco egipcio de Ramsés II, traído directamente desde Egipto. A decir verdad, aparte del obelisco, la plaza en si no tiene mucha gracia, además de que cuando llegué estaba siendo invadida de rejas y camiones porque esa noche jugaba Italia contra Alemania en las semifinales del mundial. Aproveché que estaba ahí mismo, y entré al museo Leonardo Da Vinci, que al igual que la plaza, me decepcionó enormemente. Es un museo de puras réplicas de artefactos construidos por Leonardo, y nada original… eviten entrar.
Siguiente destino: Plaza España… una mirada rápida, un par de fotos y seguí hacia mi real destino, la Fontana Di Trevi. Si alguien nunca la ha visto en fotos, le recomiendo que no lo haga, y trate de imaginar cómo podría ser… me ocurrió encontrarme con algo extremadamente más majestuoso de lo que pensaba, así que fue una grata sorpresa. En el centro, Neptuno dominando sendos caballos de mar, sobre una carroza en forma de concha que es guiada por dos tritones. Claramente es un imperdible, donde no pueden dejar de tirar la moneda (brazo derecho sobre hombro izquierdo) para la buena suerte, y de paso regalarle aproximadamente 3000 euros diarios al estado… increíble, no?!!
Mis siguientes dos paradas, eran primero el Panteón y luego Castillo Sant´Angelo. El Panteón está a solo minutos de la Fontana, y es una más de las tantas majestuosidades que encontrarán en esta ciudad! Fue construido a inicios del imperio romano en el 27 a.c. y dedicado a las 7 divinidades planetarias (panteón significa “de todos los dioses”), siendo posteriormente transformado al culto católico. El interior es tan imponente como la fachada, y si o si deben pagar la audioguía. Dentro de las peculiaridades se encuentra que en lo más alto de su cúpula, hay una abertura de 9 metros por donde entra la luz y la lluvia. La leyenda decía que en los tiempos de gloria, la lluvia no entraba al templo porque el calor generado por la inmensa cantidad de candelabros encendidos la evaporaba antes de entrar. En realidad la lluvia si entra, pero el piso apenas se moja debido a que está lleno de desagües escondidos. Para quienes quieran presenciar una misa aquí adentro, si no mal recuerdo, todos los días a eso de las 17.00 pueden asistir. Yo iba a quedarme, sin embargo me percaté que si quería tener suficiente tiempo para pasear por el Castillo Sant Angelo debía correr… y así fue! Cuando me di cuenta de la hora (el castillo lo cierran a las 19.30 y se necesitan al menos 2 horas para recorrerlo), agarré mis cosas y partí lo más rápido que pude hacia el castillo… literalmente corrí.
Para llegar al castillo, se debe cruzar el río Tíber, a través del puente Sant Angelo, que es a mi gusto el puente más precioso de toda Roma, ya que está decorado por ambos costados de hermosas estatuas (muy parecido a lo que es el Charles Bridge en Praga) y el castillo de fondo. La entrada cuesta aprox 8 €. Yo como siempre, además pagué por la audioguía, que costaba algo así como 4 € más. El castillo fue construido entre los años 123 – 139 D.C. como mausoleo personal para el emperador Adriano, sin embargo su uso como tumba funeraria solo duró hasta el 217 D.C., para ser utilizado posteriormente con diversos usos. Probablemente de estos usos, el más conocido fue como cárcel de la inquisición, ya que aquí fueron encerrados personajes tan renombrados como el mismísimo Galileo Galilei. El recorrido te lleva hasta la parte más alta del castillo, donde se tiene una vista espectacular de Roma, y desde donde se puede ver la estatua del Arcángel Miguel coronando el casillo.
Si organizan el tiempo bien, y tienen la paciencia para esperar la puesta de sol, tendrán una vista preciosa desde el puente hacia el castillo… A esa hora además es común ver recién casados que llegan a tomarse fotos… de hecho, mientras fotografiaba, uno de los fotógrafos de un matrimonio me pidió prestada mi cámara y trípode para que el marido posara tomándole fotos a la novia… y dos minutos después llegó un ruso a pedirme si por favor le tomaba una foto con mi cámara para mandársela al mail!! (al menos si me voy a Rusia, ya se a quien pedirle alojamiento jaja). Cuando terminé en el castillo, ya era de noche y había comenzado la semifinal entre Italia y Alemania. Me fui caminando por la orilla del Tíber y luego tomé Vía del Corso, por donde es muy entretenido caminar, ya que siempre hay artistas callejeros y hartos puestos donde vitrinear. Finalmente llegué a la Plaza del Popolo, donde hace algunas horas había estado y que había encontrado tan aburrida. El escenario no podía ser más distinto, cada metro, cada rincón y cada muralla estaba llena de miles de apretujados italianos y turistas que veían con ansias y fervor un partido cuyo marcador empataba 1-1. Mis amigos sabrán que no soy un fan del futbol, pero este espectáculo merecía dedicarle su tiempo… tiempo suficiente para ver justo el segundo gol de Italia y como las ansias se transformaban en pasión desenfrenada entre gritos, bengalas y petardos! Una vez que la cosa se tranquilizó, seguí mi camino y me fui a ver la Fontana di Trevi, cosa que fue un caos, ya que estaba absolutamente llena, sin embargo la suerte se apiado de mi cuando los señores carabineros irrumpieron la plaza y sacaron a todos los turistas para acordonarla y protegerla de la pasión futbolera (a esas alturas Italia ya había triunfado en la semifinal), cosa que a mi y mi cámara nos vinieron como anillo al dedo, ya que me situé estratégicamente en primera fila, con una visión panorámica excelente y sin nadie que me tapara!! Ya que era día de fotografía nocturna, cuando terminé en la Fontana, me dirigí hacia el imperdible n°1… el coliseo, cual otro, no? Camino hacia allá pude comprobar por qué los italianos tienen la fama de gritones que tienen, ya que entre bocinazos, cantos y gritos poco más se escuchaba en las calles.
El tercer día fue lejos menos intenso que el anterior, ya que las cosas de mayor interés (salvo el Vaticano) ya las había visto. Fue un día más que nada de Iglesias, partiendo por la Iglesia San Clemente. Esta es una basílica que queda cerca del Coliseo y que no figura en los mapas, por lo tanto averigüen antes, ya que realmente vale la pena por ser arqueológicamente muy rica. Resulta ser que esta iglesia está erigida sobre los cimientos de una antigua residencia que antaño fue ocupada clandestinamente para practicar el cristianismo. Posteriormente se construyó una basílica, que fue quemada, y sobre los cimientos de esta construida la basílica que hoy se puede visitar. En el siglo XIX, cuando se realizaron excavaciones arqueológicas, se redescubrió la presencia de la antigua basílica y más abajo los restos de la antigua residencia.
La Iglesia San Pietro in Vincoli no es tan majestuosa desde el exterior, sin embargo, tiene la peculiaridad, que fue edificada en el siglo V para albergar la reliquia de las cadenas con las que ataron a San Pedro durante su encarcelamiento en Jerusalén, y además en el interior se encuentra el famoso Moisés y algunas pinturas de Miguel Ángel (una que me llamó especialmente la atención, fue un esqueleto con alas de ángel que sostenía una hoz y un reloj de arena quebrado en cada mano, cosa bien poco frecuente de encontrar en la iconografía cristiana). Después de esta, seguí a la Basílica Santa Maria Maggiore, que queda a pocos pasos, y que es otra de las 4 basílicas papales de Roma… es bastante grande y claramente bien bonita, mas en lo personal no le encontré nada que me llamase extremadamente la atención (comprenderán que a estas alturas ya no quería poner un pie en una iglesia más!)
El barrio Trastevere, cuyo nombre en latín significa “tras el Tiber” y que por lo tanto, podrán deducir que se encuentra cruzando el río, es un barrio residencial y turístico, lleno de restaurants y pubs, y que según dicen, vale la pena conocer de noche (yo no fui). Al menos de día es bastante pintoresco para caminar… Lo recorrí un rato, entre a la Iglesia de Trastevere y luego fui a la Iglesia Santa Cecilia (a la cual no pude entrar porque justo estaba celebrándose un matrimonio). Desde ahí volví rumbo a tomar el metro para llegar a mi hostal, pero antes pasé por una pequeña islita que se encuentra en la mitad del Tiber. Aquí me encontré con un lugar que por ningún motivo deben dejar de visitar… una heladería increíblemente rica y bastante adecuada en precio ($4 euros helado 5 sabores), donde se encuentran desde helados común y corrientes hasta helados de Ferrero Rocher, Kinder sorpresa y otros que no recuerdo ahora.
Como iba camino al metro, y el más cercano era Circo Máximo, al lado de recinto arqueológico del mismo nombre, aproveché de pasar a ver lo que antaño era el lugar donde se realizaban las carreras de carros y caballos, sin embargo lamentablemente hoy el lugar no es más que una explanada con pasto y un par de ruinas, dejando la mayoría para la imaginación. Mientras volvía, un tanto decepcionado, me encontré con una Vespa blanca, famosa moto italiana, que me mantuvo entretenido algunos minutos con mi cámara, hasta que llegó el dueño con su pareja, con quienes conversé algún rato en inglés hasta que les pregunté de dónde venían y me enteré que eran ni más ni menos que una pareja de chilenos! Llegando al hostal ya estaba un poco agotado, y para que mentir, un tanto sobrepasado de tanta iglesia… con todo lo que había visto ese día, había cumplido mi cuota de aquí a muchos años más de religiosidad! Sin embargo, las ganas de fiesta se hacían sentir en el ambiente. Conversamos con el encargado del hostal, armamos el pre ahí mismo con él, y luego partimos siguiéndolo rumbo a un lugar de fiesta que no tengo la más remota idea donde quedaba, como llegamos, ni como se llamaba!! Hubiese sido imperdonable no gastar una buena noche de carrete internacional por las calles de Roma, no?
A la mañana siguiente, la fiesta del día anterior golpeaba insistentemente la puerta de mi cabeza… No sé cómo, pero logré despertarme a las 8am (me acosté a las 6.00) para ordenar las cosas, comer algo express y salir rumbo al Vaticano. Había tenido la precaución de dejar lo mejor para lo último, pero no sabía la caña que tendría ese día. Llegué a la cola como 30 minutos antes de que abrieran la entrada y obviamente era enorme, sin embargo, logré llegar justo antes que empezarán a arribar los containers turísticos!! La recomendación número uno es que lleguen bien temprano o bien tarde (tipo hora de almuerzo) para entrar al museo del vaticano, que es donde se forma la gran cola. Yo creo que estar temprano es mucho mejor, ya que el museo en sí es gigante y requiere horas. Como recomendaciones aparte, deben llevar la ISIC para que les hagan descuento de estudiantes (otras tarjetas no aceptan…. 8€ v/s 15€), no ir con poleras sin mangas o short muy cortos, y traten de no llevar mochila, ya que deberán guardarla en el guardarropía y para sacarla después tardarán unas 2 horas!!
De los museos, para ser súper sincero, no recuerdo mucho… es que entre tanta cosa que uno ve, y armando este relato tanto tiempo después, se me mezcló todo!! Lo que sí recuerdo claramente, y que fue de lo que más me fascinó, fue el sector de Egipto, con sus decenas de sarcófagos, momias y cientos de esculturas. Otro inolvidable, claramente es la Capilla Sixtina, la más famosa del palacio apostólico, que es conocida por su pintura al fresco de la bóveda, realizada por el mismísimo Miguel Ángel entre 1508-1512.
Una vez que terminen el museo, les quedará por ver otro imperdible de Roma; la Basílica San Pedro y la plaza del mismo nombre, donde el Papa celebra algunas de las ceremonias más importantes para el culto católico. La iglesia de San Pedro (Sant Pietro) es una de las cuatro basílicas papales, cosa que no deja de pasar desapercibida, ya que es tanto más exuberante que la misma Sant Giovanni (la catedral de Roma), adjudicándose el record del espacio interior más grande que una iglesia cristiana tiene en todo el mundo (ninguna otra puede ni debe superarla). Según la tradición, aquí yacen los restos del apóstol San Pedro bajo el altar mayor. Algo que por ningún motivo pueden dejar de hacer, es subir a la cúpula de la Basílica, donde se tiene una vista espectacular, sin dejar de lado lo entretenido que es subir por las escaleras (ya entenderán)!!
…Mi último día en Roma ya acababa y estaba rumbo al hostal a buscar mi bolso que había dejado… tomé mis cosas y a las 21.00 salí rumbo al metro. Mi vuelo hacia Valencia partía a las 07.00, y dado lo caro que era tomar un taxi a las 5am, y la imposibilidad de tomar el metro, decidí que pasaría mi última noche en el aeropuerto. Los horarios y la lejanía de los aeropuertos son el principal problema de las aerolíneas low cost en Europa (yo compré Ryan Air), sin embargo, los precios pueden llegar a ser tan ridículos que bien vale la pena los malos ratos. Llegué a la Terminal, y cuando ya estaba de lo más acomodado un guardia empezó a echarnos a todos afuera porque la Terminal cerraba por la noche debido a que no habían vuelos nocturnos!!! Menuda sorpresa que me llevé al percatarme que tendría que dormir en la calle jaja… por suerte conversando con un tipo, este me indico que había una segunda terminal, y que solo cerraba la de “salidas”, por lo tanto me fui a la Terminal de llegadas y ahí instalé mi cama hecha de parka, polerones y poleras. Fue una noche bastante agradable, donde no me desperté ninguna vez en toda la noche, y a las 05.30 am tomé mis cosas, las registré y me subí al avión rumbo a Valencia!
VALENCIA
1-28 julio
Movilización:
– Vuelo desde Roma en Ryan Air
– Para moverse dentro de Valencia, lo ideal es conseguir una tarjeta de valenbisi, ya que te permite usar bicicletas por 30 minutos gratis (luego la dejas y tomas otra). Sino, la opción es bono-metro de 10 viajes.
Alojamiento:
– Residencia Reuniver → 25€/noche con pensión completa (desayuno – almuerzo – cena). Es una residencia estudiantil prácticamente nueva. Piezas individuales o dobles con baño privado. Excelente ambiente, todo impecable. Ubicada a 15 minutos caminando del metro, pero a 1 minuto de una estación valenbisi.
QUÉ VER?
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Museo Fallero → Las fallas es una famosa celebración que todos los años se realiza en Valencia desde el 14 al 19 de Marzo. Imponentes y preciosas esculturas, algunas de un par de metros y otras de varios cuantos más, son construidas durante el año para ser expuestas en estas fechas en la calle junto con gran celebración que culmina con grandes hogueras que consumen estas esculturas. Es una tradición típica de la ciudad de Valencia y sus alrededores, y que bien vale la pena ver si se está en la época correcta. Un ninot es una representación a escala de la gran escultura presentada, y en el museo Fallero se reúnen los mejores ninots a través de la historia, los famosos ninots indultat. El museo queda ubicado en calle Encarna Albarracín 24.
- Talleres Falleros → A los alrededores del museo fallero se encuentran varios galpones donde los artistas trabajan dándole vida a sus esculturas. No es un lugar turístico, pero si como yo, tocan las puertas y piden pasar a ver, de seguro los reciben felices y más de una sorpresa se llevarán. Recuerdo uno de los talleres en que además de dejarme entrar y fotografiar, me enseñaron y mostraron cómo se hacían las famosas esculturas.
- Ciudad de las artes y las ciencias → Probablemente la postal de Valencia. Quien haya visitado esta ciudad sin al menos ver la ciudad de las artes y las ciencias, significa que no conoció Valencia. Amado por algunos por su imponente y peculiar arquitectura… odiado por otros, por los altos costos y deudas que significó para la ciudad, sin embargo, una cosa al menos tengo clara; desapercibida no pasa para nadie. Este es un complejo que incluye diferentes sitios, cada uno independiente del otro:
* Hemisferic: Tiene la forma de un ojo y es una sala cine con proyección IMAX. De todos los cortos que dan, recomiendo a ojos cerrados “El misterio del Nilo”
*Oceanográfico: Es el acuario más grande de todo Europa con 110.000 m2 y 42 millones de litros de agua.
*Museo de las ciencias Príncipe Felipe: Museo interactivo para gente de todas las edades.
*Palacio de las artes Reina Sofía: Dedicado a la música y artes escénicas. - Malvarrosa → La playa por excelencia de Valencia. Arenas claras, agua tibia y su costanera llena de locales donde degustar un buen plato Valenciano.
DONDE Y QUE COMER?
- Tasca Ángel → Picada de platos para comer tapas, ubicada en calle tundidores, detrás de la lonja… EL imperdible sin lugar a dudas. Comer lleterola, Sardinas y Allipebre de anguila.
- Puerto restaurant La Pepica → Es un clásico de Valencia, ubicado a orillas de la playa Malvarrosa… hasta el rey ha comido ahí, sin embargo, por eso mismo es caro. A los alrededores hay múltiples opciones semejantes. Probar Arroz al horno, Arroz Abanda, Arroz con costra, Fidegua.
- Casa Fila → Lugar para ir a tomarse una cerveza o tinto de verano con un buen jamón. Ubicado en Manuel Candela llegando a plaza Emilio Attard, un poco más abajo de Explorador Andrés.
- Casa Navarro → Ubicada en Playa la Patacona, justo al final de la Malvarosa (es como el 4° local una vez cruzado el puentecito). Excelente lugar para comer paellas. Después se pasan a Birra y Blue, que queda ubicado a 3 locales, donde sirven una excelente cerveza artesanal.
- Cualquier lado → Imperdonable que dejen Valencia sin probar un buen tinto de verano (vino + fanta limón + licor de guinda + hielo)
BARCELONA
6-8 julio
Movilización:
– Tren alta velocidad desde Valencia; 3:00.
Alojamiento:
– Equity Point Hostel → Es un hostal muy grande, la pieza que estuvimos era para 8 personas mixta, muy pequeña, con 1 baño. Mucha gente y con una buena área común, desayuno abundante incluido. Sin cocina. Queda ubicado al lado de la estación de metro “Passeig de Gracia”. Excelente localización. Opiniones de hostelbookers muy divididas.
Barcelona fue el primer destino que elegí para recorrer cuando estuve en España. Petete, Martina, Nico Torres y yo, estábamos haciendo intercambio de Medicina en España, por lo tanto claramente nos teníamos que juntar, y considerando que Barcelona está dentro de las ciudades más entretenidas de toda Europa, fue esta la sede de reunión. Sin embargo… estuvo a punto de cambiar de lugar, ya que el mismo día viernes que partía, me enteré que en Pamplona era la fiesta de San Fermín (las corridas de toros)… si, lo se, soy un idiota por no haberme informado o enterado antes, pero las cosas no se dieron así. Dada las cosas como estaban, a solo unas horas de partir a Barcelona, pero con todas las ganas de ir a San Fermín, es que traté de convencer a toda costa a Marco (el chileno que me consiguió el intercambio y que les hablaré después) de que arrendáramos un auto y nos largásemos a correr detrás de los toros. Es verdad que se anduvo animando un poco, pero tener turno el día domingo tiraba un poco los ánimos para abajo. Finalmente corté por lo sano, decidí olvidarme del tema (de momento) y me dirigí rumbo a la ciudad catalana.
Partí a las 3pm en un tren de alta velocidad, por lo que a las 6pm ya estaba en Barcelona. El metro me dejó al lado de mi hostal, que se encontraba a solo una cuadra de la Casa Batllo, por lo que mi primera impresión de la ciudad a lo menos fue peculiar (quienes la conocen entenderán). Cuando llegué, dejé mis cosas, e inmediatamente llamé a mi amigo Petete para que nos juntáramos y diéramos un paseíto por la ciudad. Rato después, ya estábamos yo, Petete y Martina camino al “Corte Inglés” a comprar algo para comer y tomar. Hace tiempo ellos estaban tentados de comprar quesos españoles, así que pedimos 6 tipos de quesos diferentes (mango/naranja, trufa, seco, hierbas y otro par que no recuerdo), compramos una botella de vino blanco y nos fuimos a recorrer La Rambla buscando algún buen spot donde sentarnos (unas escaleras fueron las elegidas), donde nos instalamos a comer nuestro menú gourmet. Pasado un rato llamó Nico que venía llegando, así que nos encaminamos a buscarlo al hostal y de ahí nos fuimos a pasear un rato mientras hacíamos hora para ir a una disco que le habían recomendado a Petete. Durante ese rato, discutimos lo inevitable… estábamos a tan solo unas horas de Pamplona y los 4 estábamos dispuestos a viajar como fuese, así que decidimos que al día siguiente a primera hora arrendaríamos un auto!!
Al día siguiente nos levantamos bien temprano, tomamos un no despreciable desayuno buffet y nos encaminamos a buscar por la ciudad algún rent-a-car. Terminamos en la estación de trenes, donde nos dijeron que era el lugar donde más había… calculo que estuvimos hasta medio día entre paseo y paseo, recorriendo unos 5 o 6 rent-a-car y ninguno de ellos, absolutamente ninguno, encontramos algún tipo de auto que pudiésemos arrendar hasta dentro de 1 semana más… y los buses que decir. Una lástima haber estado ahí al lado y habernos quedado con las ganas, pero al menos quedamos tranquilos de que hicimos todo lo posible por ir, y bueno… tenemos una buena excusa para volver. Resignados, tomamos el metro rumbo al barrio gótico, a mi gusto uno de los barrios más bonitos para pasear y disfrutar simplemente caminando. Nuestra primera parada turística fue el Palau Güell. El costo de la entrada no lo recuerdo exactamente, no es barato pero al menos te dan la audioguía sin costo. Esta es una residencia construida por Antonio Gaudí a finales del siglo XIX para el industrial Eusebi Güell, que en 1984 fue declarada patrimonio mundial por la UNESCO. Si me preguntan cuál es el sello de Barcelona, sin pensarlo dos veces, yo creo que cualquiera responde “Gaudí”… es tan peculiar, tan diferente y tan llamativo el arte arquitectónico, que es imposible pasarlo por alto. Asimismo, por más que pienso y trato de describir este famoso palacio que les comento, se me hace difícil encontrar una descripción adecuada… creo que simplemente es algo que debe ver cada uno, y criticarlo a su gusto. En lo personal, las obras de Gaudí fue lo que más disfruté por lejos de esta ciudad… casa Batllo, La Pedrera, La Sagrada Familia, Parque Güell, cada uno tiene algo especial y diferente, y no pueden dejar de dedicarle el tiempo necesario a cada uno de ellos. Después de terminar de ver el palacio, nos fuimos rumbo a la Catedral Gótica, que queda relativamente cerca. El interior es realmente precioso, con mil detalles que uno no se aburre de ver (el sitio del coro es particularmente bonito). Por lo que sé, la catedral tiene un subsuelo, al cual no estoy seguro se puede entrar, donde se están los restos de una antigua basílica paleocristiana, sobre la cual fue construida esta iglesia (Basílica paleocristiana → Iglesia Visigoda → Catedral Románica → Catedral Gótica), y además de esto se puede acceder al techo de la iglesia, desde donde se tiene una vista maravillosa hacia la costa de Barcelona.
Para cuando terminamos con el palacio y la catedral, ya estábamos bien pasados de la hora de almuerzo y moríamos por comer algo, así que considerando lo cerca que estábamos, y que es un imperdible de Barcelona, decidimos adentrarnos en el Mercado de la Boquería a deleitar nuestros paladares. Partimos recorriendo para tantear terreno… en el mercado hay de todo, desde carnes, productos del mar, vegetales, confiterías, etc… decidimos que estando en España, lo primero sería un buen deleite de jamón ibérico, que los venden en conos de papel (tal cual papas fritas) y que sin duda alguna puedo decir que es el mejor jamón que he probado. Jamón , más jamón y luego para pasar la sed un juguito de fruta natural. Seguimos paseando un rato y antes de irnos el infaltable número 2 de España… Sangría!! Tengo que decir que nunca había probado una y desde este momento, me volví el fan numero 1.
Almorzados y algo más descansados, nos fuimos a la Casa Batllo, otra obra de arte Gaudiniana (estilo naturalista) que no pueden perderse por ningún motivo. Al igual que el Palacio Güell, es una construcción especialmente particular, con balcones que parecen antifaces, chimeneas de peculiares formas y colores, una estufa con forma de hongo, un pasillo y pieza con forma de costillas de ballena, y un techo que asimila el dorso de un dragón… todo un espectáculo. Luego nos fuimos a pasar la tarde recorriendo el Parque Güell, que adivinen por quien está hecho… si, Gaudí de nuevo. Yo, la verdad, esperaba encontrarme con un parque común y corriente, con algunas obras de Gaudí por aquí y por allá, sin embargo me encontré con un parque donde cada detalle tenía la firma de su autor; desde las rejas, la casa-museo de Gaudí, las pasarelas, las barandas, los pilares, hasta la famosa escultura del lagarto, icono de Barcelona . Es un parque bastante grande, que se merece un buen paseo por la tarde, donde se puede subir al mirador, desde donde se tiene una increíble vista de casi todo Barcelona y el mar mediterráneo.
Finalmente para rematar, fuimos a ver el espectáculo que todas las noches hay en la Fuente Mágica. Esta es una gran fuente que tira chorros de agua que cambian constantemente, con un juego de iluminación y música bien entretenido. Se encuentra a los pies del Museo Nacional de Arte en el cerro Montjüic. Cuando llegamos además nos encontramos con una no pequeña convención de Harley Davidson!! No sé cuántas motos habrán habido, pero eran cientos y cientos, también había puestos de ropa motoquera, artículos de moto, barras de trago, locales de comida, 2 escenarios con grupos en vivo (en uno estaba Elvis) y juegos de diversiones!! Menuda fiesta que se habían armado los cabros… Pasamos por alto todo el espectáculo y nos dirigimos directamente hacia la fuente, ya que el show dura hasta las 11pm. Es probablemente una de las fuentes más entretenidas que me ha tocado ver, ya que ponen música ambiental y el agua más las luces van cambiando al son de la música y está lleno de gente por todos lados disfrutando del espectáculo. Detrás de la fuente se erigen unas eternas escaleras que comienzan a subir el cerro y que te dejan en el museo que les comenté previamente, desde donde se tiene una increíble vista de Barcelona nocturna adornada por este show de luces. Un par de cervecitas compradas a los “paquis” (regatéenselas como chilenos!!) y camino de vuelta al show de abajo. Primera parada? Los juegos de diversiones… jajaja que jugo, entre las cervezas y lo hiperventilados que andábamos, que manera de reírnos!! Seguimos con un par de ron colas (las más caras que he comprado) y nos fuimos a recorrer los puestos motoqueros y los show en vivo, hasta que al final terminamos bailando en un puesto brasileño donde había fiesta.
El domingo, a pesar de estar un poco destrozados entre tanto caminar y festejar, fue un día que comenzó temprano. Nos quedaban varias cosas aún por ver, dentro de ellas, la famosa Sagrada Familia, para la cual teníamos entradas a las 10-11am. Muchos no saben, y se deben aguantar una cola eterna para entrar a la catedral. Evítense esto y compren la entrada a través de los cajeros Caixa… es verdad que te cobran por el uso de la tarjeta y además debes elegir un horario establecido, pero cuando uno corre y no quiere perder el tiempo, vale 100% la pena. Había escuchado que la Sagrada Familia era algo impresionante, y cuando la vi desde el mirador del parque Güell así parecía, sin embargo, nunca esperé encontrarme con algo así de imponente. Sin lugar a dudas, es por lejos de las construcciones que más me impresionó, incluso superando a las magnificentes basílicas de Roma y el Vaticano. La Sagrada Familia es una basílica católica diseñada por Gaudí, y que comenzó a construirse en 1882, y que hasta la actualidad aún no se termina (se estima que podría estar lista para el 2026 aproximadamente). La basílica tiene cientos de particularidades, dentro de ellas que cada fachada tiene un estilo diferente a la otra y un significado y representaciones diferentes. Cuando se termine, poseerá 18 torres; la central y de mayor altitud representa a Jesús, otra a la Virgen, 12 para los apóstoles y 4 para los Evangelistas. El interior está diseñado de tal forma que representa un bosque, con potentes columnas que se dividen representando las ramas de los árboles; bajo el altar mayor, está la cripta donde fue enterrado Gaudí cuando murió en 1926 y actualmente es ocupada como iglesia parroquial hasta que se finalice el templo. Creo que demás está decirlo, pero de todas formas, por ningún motivo se les ocurra visitar la basílica sin audio guía, ya que la cantidad de iconografía y detalles es tal que de otra forma es imposible conocerla y entenderla… sin lugar a dudas, todo un panorama que no merece menos que una mañana completa.
Hora de almuerzo contrarreloj, ya que aún nos quedaban muchas cosas por ver y al menos mi tren partía a las 8pm, así que fuimos al infaltable Burger a comer algo rápido. Cuando terminamos, estábamos en el gran dilema de qué ver… aún nos faltaban cosas importante como La Pedrera, el Castillo Montjüic, el teleférico, el Parc de la Ciutatella y la famosa Barceloneta!!! Como podrán ver, Barcelona por más rápido que uno sea, es para varios días. Un poco dubitativos, decidimos ir a la Pedrera, sin embargo, cuando llegamos y nos encontramos con que debíamos pagar 15 euros por entrar y hacer una cola de aproximadamente 1 hora, se nos quitaron un poco los ánimos, así que luego de tomar un par de fotografías desde afuera, llamamos a Petete y nos quedamos de juntar en la playa. La Barceloneta es una de las playas más conocidas y concurridas de la ciudad, siendo famosa por su área nudista. Llegamos por metro hasta la estación Drasanes, que si bien no es la más cercana a la Barceloneta, nos dejaba bastante cerca y nos permitía recorrer la costa, que tiene varios lugares interesantes y bonitos. Lo primero que nos encontramos al salir del metro, fue el monumento a Colón, adornado de sendos leones en su base, los cuales son frecuentemente montados por los turistas para sacarse fotos (incluyéndome). Desde ahí comienza el paseo que va bordeando la costa, pasando al lado de un gran embarcadero privado donde habían desde pequeños veleros hasta magníficos yates de lujo!! También nos encontramos con un antiguo barco a velas que estaba reclutando marineros para zarpar dentro de un par de días. Era turístico y debías pagar algo como 300 euros, pero la gracia es que era un viaje que duraba dos semanas en donde tu eras parte de la tripulación. Llegamos a la Barceloneta, nos compramos algo para tomar y nos juntamos con Petete… arrendamos un quitasol que nos costó 5 euros y que irónicamente ni usamos, unas cervezas y nos tendimos a disfrutar de la agradable vista local. Cuando dieron las 6pm y sonó mi alarma avisándome que debía correr al hostal para agarrar mis cosas y no perder el tren, tengo que decir que mi estado de plenitud pedía a gritos que perdiera casualmente el tren y me quedara un día más!! No era un mal negocio, podría disfrutar lo que quedaba de tarde en la playa y a la noche iría a la famosa discoteque Opium, que me había quedado con las ganas las noches anteriores. La pensé harto, e incluso llamé a mi amigo Marco para preguntarle qué opinaba, sin embargo, no me animó mucho, y en vista y considerando que era recién mi segunda semana y aún no tenía ninguna nota puesta, decidí a regañadientes agarrar mis cosas rápidamente e irme antes de arrepentirme.
El viaje en tren ni lo recuerdo porque lo dormí todo, llegué como a las 11pm a la estación, y a esa hora ya estaba cerrado el metro, así que me acerque a un señor que vi estaba con maleta también para preguntarle si había alguna micro que me sirviera. Me dijo que a esa hora me convenía tomar un taxi no más, y me preguntó a dónde iba. Resulta que él iba en la misma dirección y me ofreció que compartiéramos taxi… el viejo tenia como 60 años y era un chiste, en el ratito que conversábamos le gritó piropos a cuanta señorita se nos cruzó por delante. Acepté su ofrecimiento y tomamos el primer taxi que pasó, en el trayecto le fue dando la lata al conductor sobre lo buenas y calientes que estaban todas las mujeres que se nos cruzaban, mientras yo me reía atrás jajaja. Paramos a un par de cuadras de mi residencia y cuando iba a pasarle pagar la mitad a este personaje no me aceptó, y en vez de eso me invitó a que nos fuéramos a tomar unas cervezas a su local que tenía a unas cuadras!! Rara la situación, así que agarré mis cosas rápidamente y después de decirle que no y que muchas gracias partí velozmente a mi residencia.
CONTINÚA